Una joven dio a conocer que la noche de este domingo, le fueron grafiteadas amenazas de muerte en la fachada de su vivienda, después de denunciar públicamente haber sido víctima de una agresión con una botella con combustible al exterior de su domicilio, por lo que pide protección a las autoridades. El caso sucede a la par de la muerte de Luz Raquel Padilla, victima de un ataque similar en Jalisco.
La vivienda de la joven que denunció la agresión, se encuentra en la colonia Parajes de los Pinos, en Ramos Arizpe, y fue grafiteada este domingo por la noche, con amenazas de muerte que incrementaron el temor de que las agresiones sigan escalando de nivel.
“Unos vecinos me tocaron que habían visto mi casa toda grafiteada, donde recibo amenazas, a un lado de mi casa dice te voy a matar perra, y enfrente de mi casa dice te voy a matar, con una equis”, advirtió la joven.
Afirmó sentir temor por la situación en la que se encuentra, ya que las autoridades dejaron en libertad a quien señala como su agresor, sin informarle de esto, ni brindarle alguna protección.
El jueves por la tarde, fueron los propios vecinos los que la ayudaron a detener al probable delincuente, y lo pusieron a disposición de las autoridades, quienes recibieron la denuncia de la víctima, y se comprometieron a darle seguimiento al caso, sin embargo, la tarde del sábado el joven fue puesto en libertad.
“El día sábado lo dejan libre, nada más estuvo 48 horas detenido, las autoridades quedaron de que si llegaba a salir libre, me iban a dar una orden de protección, me iban a avisar para que yo tomara mis precauciones, y me enteró de que ya está libre por los propios vecinos. No he dormido nada, no he descansado», comentó.
Tras informar a las autoridades sobre las amenazas de muerte que fueron grafiteadas al exterior de su vivienda, los agentes del Ministerio Público le solicitaron permiso para pintar nuevamente la casa, argumentando que ya se habían tomado las fotografías como evidencia, y que esta situación estaba causando psicosis entre los vecinos, a lo que la joven accedió.
La joven afirmó sentir que no se está haciendo justicia, ya que pese a las pruebas presentadas y su declaración, se le indicó que no existían elementos suficientes para considerar un intento de feminicidio, debido a que no existía relación entre ambos, y que tampoco se podría perseguir el delito de intento de homicidio, ya que la botella y el fuego no la habían alcanzado.
Mientras espera el actuar de las autoridades, Ángeles Arenas, afirma que sus familiares le han pedido que deje el trabajo y se regrese a su natal Veracruz, pero ella señala que buscará cambiar de domicilio y poder dejar atrás el terror que ha vivido en los últimos días.
Con información de Milenio.