Obliga ley a despedir a guardias de fraccionamientos en Saltillo

0
218

Los vacíos jurídicos en la regulación de casetas de seguridad mantienen en incertidumbre a los colonos

Decenas de vigilantes de fraccionamientos privados fueron despedidos ante la notificación que recibieron los habitantes de esto sectores de la Secretaría de Seguridad Pública, por la falta de permisos para el desempeño de la seguridad privada en sus casetas.

Además de dejar a la deriva de la inseguridad a decenas de casas y a sus habitantes, los guardias de seguridad podrían ser sancionados al no cumplir con un Sistema de Seguridad Privada.

Los vacíos jurídicos en la regulación de casetas de seguridad a la entrada de los fraccionamientos y la imposición de permisos y autorizaciones que expide la Ley del Sistema de Seguridad para que éstos operen y coadyuven con la seguridad Pública, mantienen en incertidumbre a los colonos.

“Tendríamos que contratar una empresa privada que ofrezca el servicio de seguridad para un fraccionamiento, lo cual es más caro, pero tampoco podemos obligar a todos los colonos a que se hagan cargo de la cuota mensual por nuestra seguridad”, explicaron habitantes de un fraccionamiento al oeste de la ciudad.

A LAS FILAS DEL DESEMPLEO

Mientras que las personas de confianza que se encargaban de hacer el registro de quienes entraban y hasta de abrir y cerrar el portón a visitantes, quedaron desempleadas.

“Se les informa que los servicios de seguridad privada solo pueden proporcionarse después de haber cumplido con los permisos y autorizaciones que exige la ley, por lo que exhortamos a realizar los trámites legales correspondientes a partir de esta notificación”, expresa un documento firmado por la Secretaría de Seguridad Pública.

PODRÍAN IR A LA CÁRCEL

La misiva advierte sobre una sanción penal de hasta cuatro años de prisión a quien preste servicios de seguridad privada sin autorización, así como de 300 a 600 días de multa e inhabilitación de sus servicios, a menos que la autoridad les expida permiso.

Información por VANGUARDIA.