El periodista y analista político, Luis Enrique Ramírez Ramos, fue encontrado este día muerto, después de haber sido secuestrado el miércoles cuando salía de su domicilio en la colonia Los Pinos.
La Fiscalía General del Estado confirmó que el cuerpo fue encontrado en un camino vecinal a orillas del kilómetro 15 de la carretera internacional Culiacán-Mazatlán. El cuerpo estaba envuelto en una bolsa de plástico color negro y fue recogido por personal del Servicio Médico Forense.
Tras darse a conocer la noticia, la fiscal de Sinaloa, Sara Bruna Quiñónez, expresó sus condolencias hacia la familia del comunicador y se comprometió a esclarecer el caso.
El también columnista del Debate de Culiacán era escritor y había colaborado con Carlos Monsiváis y Elena Poniatowska. Era el analista político más influyente en el estado de Sinaloa. Había escrito dos libros y colaborado en los periódicos más importantes del estado.
El periodista estaba bajo la protección de la Organización Internacional Articulo 19 porque decía que corría peligro después de que habían asesinado a cuatro personas relacionadas con él porque publicaba notas comprometedoras de la política sinaloense.
“Yo no escribía del narco, solo de política”, decía Luis Enrique Ramírez el Gobierno de Sinaloa a veces es intolerante a la crítica.
Durante el periodo de 2010 a 2016 mataron a cuatro personas relacionadas con la Dirección de Gobernación de donde se informaba Luis Enrique Ramírez, mataron al Director de Gobernación Luis Pérez Hernández, luego mataron al periodista Humberto Millán Salazar y luego a un estilista que se llama Olivia Alonso que tenia relaciones con ellos y finalmente a Francisco Urrea que era amigo íntimo de los cuatro.
Por eso Luis Enrique huyó de Sinaloa para protegerse y solicitó la protección de la Organización.
Regreso a Sinaloa después del 2016 y fue cuando se incorporó como analista político al periódico El Debate de Culiacán y desde entonces publicaba su columna que se llamaba fuentes fidedignas, en donde comentaba exclusivamente temas políticos y cuestionaba la labor no solamente del gobierno si no de los partidos políticos como el PAN, el PRI y el PRD.
“Fue definitivamente un asesinato”, dijo Balbina Flores, representante de la asociación Reporteros Sin Fronteras (RSF). Por su parte, el grupo Artículo 19, también defensor de la libertad de prensa, pidió a las autoridades asegurar una “investigación pronta, imparcial y diligente” para esclarecer lo ocurrido.
El homicidio de Ramírez es el noveno contra la prensa mexicana en 2022, un año particularmente violento contra los trabajadores de la información del país.
Con información de El Financiero.
