Hace unos días, informábamos sobre la detección de casos de la influenza aviar AH7N3 en dos naves de producción comercial. Si bien la situación no se ha salido de las manos, fue imposible para las autoridades contener la enfermedad.
Según el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), la gripe aviar se extendió a una granja de Ramos Arizpe y tres granjas de La Comarca Lagunera, una de ellas ubicada en Gómez Palacio, Durango.
En estos nuevos focos de infección detectados se reporta la muerte de al menos 207 mil aves, que se suman a las primeras 70 mil sacrificadas en General Cepeda, donde se confirmó la presencia de la cepa desde el viernes pasado.
El órgano de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER), reveló que tan sólo en la granja de Durango, hay una población de 48 mil aves, por lo que se puso en marcha un operativo de sobrevigilancia epidemiológica en la región.
De esta forma, se tomarán muestras en el 100 por ciento de las unidades de producción avícola de Coahuila y parte de Durango, en los municipios que forman parte de la Comarca Lagunera.
Los técnicos de la Dirección General de Salud Animal del Senasica impusieron cuarentena definitiva en todas las unidades de producción afectadas, y supervisan la aplicación de las medidas zoosanitarias correspondientes que, además del despoblamiento de las granjas, implica la destrucción de los restos de los animales, sus desechos y demás materiales contaminados, para posteriormente realizar una limpieza y desinfección meticulosa de las instalaciones.
Con información de Excelsior.
